El ritmo con el que su corazón palpita
palpita, palpita
La cadencia de ver su pecho bajar
subir y bajar
La forma en la que su nariz se mueve
se cierra y se abre
Su pelo, recogido atrás
sus ojeras no me paran de mirar
la bata a media abrochar
sentada en un esquina de mi habitación
iluminada por la farola y la luna
me devuelve a la quieta cuna
¡Y esta mujer!, es un no parar
chutar, chillar, charlar
y luego volver a empezar
me dice que tengo azogue
y tiene miedo de que me ahogue
me caiga, me queme o me roben
pero me acurruca en la cama
me cubre, me duerme, me calma
me hace persona
me sigue gestando fuera del vientre
me besa en la mejilla y en la frente
protegiéndome hasta el día siguiente
La mejor madre del mundo
es la mía y punto
no ha de rimar
Te quiero, Mamá.